Orígenes de la parroquia

La «parroquia de Santo Domingo de la Calzada y la Inmaculada Concepción», en Ciudad Santo Domingo, de Algete, empezó celebrando sus eucaristías (allá por los años 70) en un espacio cedido por el Club Social de la urbanización, y, en tiempo propicio, también bajo las encinas (entonces con menos torcaces y mirlos que hoy).

Se instaló más tarde en un templo, que sugiere una gran carpa móvil en forma de cruz. La empresa que la construyó, Huarte, se comportó con importante generosidad en esta obra.

Por sus orígenes y su historia, esta parroquia parece tener la experiencia de que la fortaleza de la Iglesia y del cristiano consisten en su aparente fragilidad.

El Proyecto

El proyecto arquitectónico, en forma de cruz y con una gran linterna central, es obra de Juan Aguiló, » el marido de Nines» (la urbanización Santo Domingo se ha configurado con un cierto espíritu de pueblo, visible por ejemplo en la plaza del centro comercial).

Financiadas con donativos, las obras – aún no del todo concluidas, faltan una vidriera decorativa en la cúpula, o el porche de entrada, por ejemplo – se prolongaron diez años, a partir de su inicio en 1975.

La generosidad es más humana aunque menos llamativa, si se pone en práctica peseta a peseta, hoy en euros.

La Inauguración

El conjunto, que inauguró el arzobispo de Madrid don Ángel Suquía el 13 de Octubre de 1985 (lo recuerda una lápida en el vestíbulo de la capilla, escrita en latín).

Integra la iglesia propiamente dicha, con la capilla del Santísimo, adornada con unos interesantes altorrelieves obra de los hermanos Orejudo de Salamanca, en la cabecera de la cruz; la casa vivienda del párroco; la del sacerdote coadjutor.

El Patio Interior

La decoración es muy sencilla, con paramentos de ladrillo descubierto, y las cuatro naves convergiendo hacia la gran linterna central que proyecta la luz de lo alto en la mesa del altar. El tejado es de estilo segoviano, es decir con la teja vuelta. Está rodeada por unos magníficos jardines que se llenan de rosas en primavera/verano.

Un punto de especial atractivo de la parroquia es » el jardín litúrgico», pequeño espacio ajardinado junto a la capilla del Sagrario, por su lado izquierdo, y visible a través de su cristalera, al que se asoma alguna encina de la primitiva dehesa – en ellas les gusta cobijarse a los petirrojos.

Hay una bellísima imagen de María con el Niño en pie, esculpida en piedra blanca por el escultor Juan Luis Vasallo, y regalo de su familia a la parroquia.

Desde sus orígenes, la parroquia ha tenido cuatro Párrocos: Don Arturo López Nuche, de estirpe de marinos y a quien está dedicada la plazoleta de la entrada hasta 1994; Monseñor Pedro Luis Mielgo, Vicario Episcopal de la diócesis de Alcalá y capellán de Su Santidad (con Don Pedro Luis actuó como co-adjutor durante 9 años Don Jesús Santana Montesdeoca) hasta el 17 de octubre de 2004; a continuación Don Francisco Rupérez asumió la función de párroco a la vez que cumplía sus obligaciones como responsable de la Pastoral Universitaria de Alcalá. El 23 de septiembre de 2007, entró Don José Mª Sánchez de Lamadrid como nuevo párroco e igualmente con una segunda responsabilidad como juez de los tribunales eclesiásticos de la diócesis de Alcalá, con Don José Mª ha estado como co-adjutor, hasta septiembre 2019,  Don Vicente Guzmán. Actualmente está como adscrito, Don Manuel Aroztegi.